Cada vez somos más conscientes de que los recursos de nuestra Tierra son limitados y que, al ritmo de consumo europeo, necesitaríamos varios planetas más pronto que tarde…. ¡pero no todo está perdido! Las nuevas generaciones buscan formas distintas para vivir de forma sostenible, invirtiendo en fuentes de energía renovables (a nivel global) y descubriendo acciones locales (a nivel individual), de forma que podamos reducir nuestra huella ecológica en el planeta.
Uno de los puntos más relevantes y que afecta al medio ambiente, es nuestro modelo actual de consumo, tanto a nivel de producción como de consumo. Esto ha ocurrido porque el crecimiento económico y el avance de las tecnologías han llevado a una mayor demanda y producción de servicios, que han afectado negativamente a los problemas actuales del medio ambiente, como el calentamiento global, la contaminación, la escasez de recursos naturales y la pérdida de especies animales y vegetales.
¿Alguna vez has oído hablar del movimiento “para un consumo inteligente”? 💡
Hay en marcha un movimiento de #concienciaciónciudadana desde las instituciones europeas para que el consumo de productos sea cada vez más responsable y sostenible con el planeta y con la salud. Se trata del movimiento «para un consumo inteligente», según el cual, ¡ahorraremos energía⚡, dinero , cuidaremos el planeta y nuestra salud✌️! Todo ventajas.
En este artículo te proponemos revisar tu forma de consumo para mejorarla y añadir aquellos tipos de consumo que te lleven a ser un Consumidor inteligente 💡
-
Consumo consciente: se trata de conocer los derechos de los que disponemos como consumidores antes y después de adquirir un producto, así como responsabilizarse de nuestra forma de consumo y sus consecuencias.
- Consumo informado: dentro de nuestra libertad para decidir lo que queremos comprar, es muy importante mantenerse informado. Comparar el mismo producto en distintas calidades y precios y valorar que sea el producto adecuado para satisfacer nuestras necesidades y los beneficios que nos aportará.
- Consumo crítico: no dejarse llevar por la moda, la publicidad o el atractivo del producto. Un consumidor inteligente es crítico con lo que le venden y elige y valora lo que tiene y lo que consume por su calidad. ♀️
- Consumo saludable: una dieta equilibrada y unos hábitos saludables fomenta una buena salud, por encima de la compra de productos debemos priorizar nuestra salud , cuidándola con hábitos sanos. ♀
- Consumo sostenible: para ser un consumidor inteligente hay que reducir el efecto de nuestro consumo en el medio ambiente. Para ello, es clave elegir productos ecológicos, reciclar los envases que obtenemos, ahorrar energía o utilizar medios de transporte menos contaminantes. ♻
- Consumo solidario: valorar el efecto de nuestro consumo en los demás nos hace mejores consumidores. Siempre que puedas, opta por elegir productos de comercio justo, social y políticamente responsables, de producción local y artesanal con el fin de ayudar a otras personas.
- Consumo activo: cuando un consumidor tiene en cuenta al resto, puede formar alianzas y tener más fuerza a la hora de luchar por mejores calidades, responsabilidades y sobre todo por los derechos del consumidor.
Tips para mejorar tu consumo inteligente. 💡
Analiza el etiquetado: elige productos ecológicos, comprueba el etiquetado nutricional, escoge productos de la zona etc.
Tip: antes de ir a la compra ¡prepara tu lista y evitarás gastos innecesarios! |
Utiliza siempre productos de temporada, lo notarás en tu bolsillo y en el medio ambiente. |
Reduce los productos con muchos envases ¡menos plásticos! |
Amplia tu consumo inteligente a productos del hogar (electrodomésticos de bajo consumo energético) |
Evita los productos con materias primas que estén en riesgo de extinción. |
Aquella persona que es capaz de tomar buenas decisiones a la hora de escoger un producto o servicio, atendiendo a sus necesidades personales y globales es un consumidor inteligente. Una forma de ahorrar dinero, energía, cuidar de la salud y de nuestro planeta.

Experta en Nutrición, Dietética y Cuidado Personal.
Nutricionista y divulgadora. Andrea se graduó en Nutrición y Dietética por la Universidad Complutense de Madrid y, posteriormente, se especializó en la Nutrición Personalizada y Comunitaria con un Máster en la Universidad de Valencia. Pero su auténtica vocación ha sido la divulgación siempre con el objetivo de llevar su know how sobre la buena alimentación al público general.