Lavarse el pelo puede ser una acción que hacemos casi a diario. Cualquiera diría que la tiene controlada. Pero, ¿es eso realmente cierto? ¡Ten en cuenta que tu salud capilar puede depender de ello!
Para sacar el máximo provecho a este paso de Belleza, te damos unas pautas que, si sigues, te ayudarán a presumir de melena.
Fíjate en los ingredientes de tus productos para el pelo
Algunos pueden ser más perjudiciales para el cuero cabelludo como ciertos alcoholes y sulfatos. Encuentra el que mejor se adapte a tus necesidades sin dañar tu cuero cabelludo.
¿Cuál es tu tipo de cabello?
No es lo mismo que sea grueso, normal o fino. Por eso debemos usar productos adaptados a su grosor.
¿Cómo puedo identificar el grosor de mi cabello? Cabello grueso: Puede ser de dos tipos, el liso que por ser tan grueso se aplasta por su propio peso desde la parte alta de la cabeza o el rizado con mucho volumen natural. Cabello normal o medio: Se identifica por una onda suave y por ser el más manejable. No suele enredarse demasiado salvo en la zona de la nuca. Cabello fino: Es el cabello que más se enreda. Además se engrasa muy a menudo y no tiene casi volumen. |
Presta atención a lo que pide tu melena.
Cada cuero cabelludo tiene sus necesidades y afecciones. La caspa, la irritación, la caída de cabello son sólo las más conocidas. En estos casos, lo ideal es utilizar un tratamiento de parafarmacia que se alterne con el champú normal o, incluso, lo sustituya. Lo ideal es consultarlo antes con tu dermatólogo.
Un 33% de la población mundial tiene caspa. ¡Eso es casi la mitad de todo el planeta! |
¿Qué quieres potenciar?
Además de conocer las necesidades de tu cabello, identifica qué condición quieres mejorar. Puede ser el volumen, la nutrición, la búsqueda de brillo…
Desenreda el pelo antes de lavarlo
El pelo mojado es más frágil que el seco. Por lo que para evitar las roturas durante el cepillado, es mejor desenredarlo antes de la ducha.
Sigue la frecuencia de lavado apropiada
Lo ideal es lavar el cabello cada tres días si la higiene lo permite. Podemos lavarlo cada día si el cabello es muy graso (aunque no es lo más recomendable) pero sólo aplicando una dosis de champú y con un producto equilibrante. Otra opción es recurrir a champús en seco.
El problema de lavarlo cada día es que eliminamos, aparte de impurezas, los aceites naturales que segrega nuestro cabello.Esto le lleva a producir más aceites para protegerse y puede acabar dando ese aspecto graso.
No apliques demasiada cantidad de producto
Con esto nos referimos al champú, a la mascarilla y a las cremas de peinado. Si lo aplica en exceso, puedes asfixiar el folículo piloso y provocar la caída del cabello.
Céntrate en la raíz.
Es la zona del cabello que más debes trabajar. ¿Cómo? Masajéala despacio durante, al menos, tres minutos para activar la circulación. Repite el proceso dos veces más (una con champú y otra sin él). Esto potenciará la nutrición de tu cabello.

Las puntas se limpian solas.
Deja que la espuma vaya bajando desde la raíz y no añadas más producto para las puntas. Tampoco es necesario frotarlas.
Haz que tu cabello brille más.
Para ello, sólo tienes que aclarar el champú con agua templada y terminar con agua fría.
En definitiva, una buena melena se base en una buena higiene y salud capilar. ¿Sumarás estos pasos a tu ritual de belleza?

Esta graduada en Educación Infantil por la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, dio un giro de 180º a su profesión tras diez años dedicados a la enseñanza por su vocación: el mundo Beauty. Tras formarse en estética, cosmética, maquillaje y peluquería, Lidia entró a formar parte de la plantilla de contenidos de Nutritienda en 2017 donde ha unido ambas pasiones llevando a nuestros clientes las novedades del sector Belleza mientras enseña a usar las últimas técnicas en nuestro Blog.