El Reishi (Ganoderma Lucidum) es un hongo milenario muy apreciado en la medicina Oriental. Su origen reside en China, donde le conocen como el “hongo de la inmortalidad” ya que aumenta la energía espiritual.
Tiene un fuerte sabor amargo, es por eso que no se consume en estado natural. Este hongo crece en la corteza de distintos árboles, con una forma riñonada que lo hace muy peculiar.
HONGO ADAPTÓGENO
El reishi, es calificado como un hongo “adaptógeno”, ¿qué significa esto?, que aumenta la vitalidad y el bienestar, aportando nutritientes especiales que ayudan al cuerpo a alcanzar un rendimiento óptimo a nivel mental, físico y de trabajo.
Pero sus propiedades van mucho más allá, acelera la regeneración celular, fortalece el sistema endocrino, nervioso e inmune, y además, retarda el envejecimiento y los procesos degenerativos, por eso se le conoce como el hongo de la eterna juventud.
PROPIEDADES DEL HONGO REISHI
Arriba ya hemos mencionado algunas de las propiedades de esta maravilla milenaria, pero si quieres sorprenderte aún más, no dejes de leer:
➡ Estimula y fortalece el sistema inmune. Este hongo contiene polisacáridos que tienen la capacidad de reforzar el sistema inmune debilitado, y además, incrementa la resistencia de las células frente a virus y otro tipo de patologías.
➡ Posee efecto antiinflamatorio, gracias a que es un potente antioxidante que reduce los radicales libres, y también, contribuye a eliminar toxinas de nuestro organismo.
«Para obtener el mayor beneficio, y potenciar aún más su acción antioxidante, puede tomar Reishi junto con Vitamina C, ya que potencia la absorción de los ingredientes activos de este hongo.»
➡ Mejora y regula el funcionamiento de las glándulas suprarrenales y la producción de sus hormonas.
➡ Actúa como relajante del sistema nervioso central, por lo que es ideal en casos de estrés, ansiedad e insomnio, ya que favorece el sueño.
➡ Hepato-protector: ayuda a regenerar las células hepáticas, disminuir los procesos inflamatorios y acelera la metabolización del alcohol.
➡ Mejora el estado cardiovascular, debido a su contenido en ácido oléico, que disminuye el colesterol LDL (el “malo”) y, por otro lado, mejora el flujo sanguíneo, debido a sus agentes anti-plaquetarios.
➡ Contiene 17 aminoácidos, entre ellos, todos los esenciales para el correcto funcionamiento del cuerpo humano. Así mismo es rico en minerales como el zinc, manganeso, magnesio, potasio, calcio, germanio y ácido fólico (vitamina B9).
Recuerda bien su nombre, si quieres obtener todos sus beneficios de una forma sencilla y cómoda, puedes hacerlo aquí.
Sandra es licenciada en nutrición y dietética especializada en hábitos alimenticios saludables.