Siempre se ha dicho que el vino es muy bueno para el corazón, que la cerveza sirve como recuperador después del ejercicio, que el ron…¡ui de esto no dicen nada bueno! Estas recomendaciones las hemos utilizado como excusa para hartarnos de cervezas los viernes al salir del trabajo o de copas con los amigos, siendo el alcohol en exceso perjudicial para nuestra salud. ¿Y qué pasa si eres deportista? En este artículo vamos a ver que ocurre al combinar alcohol y ejercicio.
¿Influye el alcohol en el rendimiento?
La respuesta es SÍ rotundo, tanto de forma inmediata tras su ingesta como a largo plazo.
Tras consumir alcohol nuestras capacidades físicas pueden verse reducidas, por ejemplo:
Disminuye la fuerza y la resistencia.
Aumenta la fatiga.
Altera la coordinación y precisión.
A largo plazo, la ingesta de alcohol suprime la respuesta anabólica del músculo, al interferir en la ruta m-TOR (una de las rutas esenciales en la hipertrofia muscular). Además, impide una correcta recuperación y afecta negativamente en el rendimiento, consecuencias contraproducentes en cualquier disciplina deportiva.

El alcohol aumenta la degradación proteica, favoreciendo la pérdida de masa magra. |
¿El alcohol engorda?
El alcohol aporta únicamente calorías vacías (unas 7kcal/g), llegando a tener desde unas 120 kilocalorías una cerveza a unas 250 una copa, y un exceso de energía a través de la dieta se traduce en un aumento de las reservas de grasa.
Por lo tanto, si tu objetivo es la perdida de peso o definición, no está muy aconsejado el consumo de alcohol.

El consumo continuado de alcohol se relaciona con un aumento del perímetro de la cintura. |
¿Sirve la cerveza como recuperador?
Si acaso podría decirte que sí si fuera sin alcohol, ya que esta aporta carbohidratos y minerales, necesarios para reponer las pérdidas. Sin embargo, el alcohol presenta efecto diurético, favoreciendo la deshidratación, posiblemente ya presente en nuestro cuerpo. ¡Cuidado! sobre todo en verano.
El alcohol deshidrata. |
¿Algún efecto positivo del alcohol?
Un estudio reciente realizado sobre 15.000 personas ha mostrado que el consumo moderado de alcohol (hasta 7 bebidas por semana) está asociado con una reducción del 20% en hombres y el 16% en mujeres de la incidencia de insuficiencia cardíaca. Sin embargo, no tiene en cuenta otros factores de estilo de vida que puedan haber influido en los resultados, por lo que se debe seguir investigando antes de llegar a una conclusión final.
Tras haber conocido estos datos no pretendo que elimines 100% el alcohol, pero si bebes que sea con moderación y con conocimiento de causa, ajustando la frecuencia y la cantidad según tus objetivos. No es lo mismo ser un deportista amateur que uno profesional, en el cuál una gota de alcohol puede interferir en tu rendimiento.
CONCLUSIÓN:
- Si no sueles beber no te pases al alcohol por la fama de sus posibles beneficios.
- Si vas a beber, hazlo con moderación.
- Ten en cuenta tus objetivos a la hora de elegir la bebida.

Experta en Nutrición, Dietética y Cuidado Personal.
Isabel es dietista-nutricionista con amplia experiencia en diferentes sectores enfocados a la salud, la seguridad alimentaria y la higiene. Tras su paso por caterings, consultas y empresas de auditorías higiénico-alimentarias, Isabel se presenta como una técnica experta en seguridad alimentaria.